Pecadora
PECADORA
Una jauría humana perseguía a la mujer. Casi sin respiración llegó ante Jesús. Todos la rodearon amenazantes, con piedras en las manos: era la adúltera pecadora.
Se hizo un silencio tenso. Jesús comenzó a escribir algo en el polvo del suelo. Luego, mirando a todos, habló con voz serena::
-El que esté libre de pecado que tire la primera piedra.
Poco a poco todos desfilaron. El Maestro y la mujer quedaron solos.
-Mujer, ¿dónde están los que te querían lapidar?
-se han ido.
-Mujer, si ellos no te condenaron, yo tampoco te condeno. Vete y no peques más.
La mujer se secó las lágrimas. Con sonrisa amarga, musitó:
-Gracias, Señor.
Anduvo unos pasos y paró. Dio media vuelta:
-Señor, ¿es pecado dar y recibir todo el amor y placer que reclama mi cuerpo?
Olegario García Fdez.
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